La Comisión Europea ha lanzado una nueva campaña de concienciación para advertir a los europeos del daño medioambiental y el impacto «económico, social y personal» que supone el desperdicio de residuos, por el uso «insostenible» de los recursos naturales.
El objetivo es convencer a los consumidores de que antes de desechar los productos es posible reutilizarlos, reciclarlos, intercambiarlos y repararlos, para alargar su vida y reducir su impacto. El Ejecutivo comunitario ya ha impulsado campañas similares desde 2011 que han llegado a más de 4,5 millones de personas, según estimaciones de la Comisión.
Bruselas espera que la campaña ‘Generation Awake’ contribuya a afianzar modelos de consumo más responsables, para lo que ha creado una página web –disponible en los 24 idiomas oficiales de la UE– en la que explica las consecuencias de las decisiones de compra que se toman a diario y enfocadas a considerar los residuos como recurso.
Solo en 2010, la Unión Europea produjo 2.520 millones de toneladas de residuos, lo que supone un volumen de 5 toneladas de basura por habitante y año.